Aunque los cuadros de mando (business intelligence (BI) dashboard en inglés) son muy comunes en las grandes compañías, lo cierto es que no se utilizan tanto en las instituciones educativas. ¿El motivo? No lo sabemos, pero sin duda es un error, pues no dejan de ser herramientas de gestión muy útiles para tu negocio, ya tengas cinco, cincuenta o quinientos empleados. Además, con la tecnología actual, la construcción de los cuadros de mando resulta mucho más sencilla de lo que era en el pasado.
Echemos un rápido vistazo a lo que estos paneles de control pueden hacer por tu negocio y cómo podrías empezar a utilizarlos.
¿Qué es un panel de control?
No hay nada mejor para explicar algo como un caso práctico, así que probemos con uno. Imagina, por ejemplo, tu auto. El vehículo es capaz de mostrar toda la información que necesitas saber para poder utilizarlo: la velocidad, el estado del motor, si necesitas cambiar el aceite, etc. En un negocio, un cuadro de mando es exactamente lo mismo.
Se trata de una herramienta de visualización de datos que, a grandes rasgos, muestra los indicadores clave de rendimiento (KPI) y otros datos importantes de tu empresa: cifras de venta, inventario, datos financieros… En otras palabras: cualquier dato relevante de tu compañía puede ser visualizado y compartido a través de un cuadro de mando, lo que te permitirá conocer de primera mano cómo van las cosas en tu negocio y tomar decisiones futuras a partir de ello.
¿Cómo se hace un cuadro de mando?
Existen muchas herramientas de visualización de datos y BI disponibles para la creación de cuadros de mando. La clave es elegir uno que sea sencillo, de manera que tanto tú como tus empleados podáis crear, editar y compartir información fácilmente, sin necesidad de conocimientos especializados.
En este sentido, Microsoft Power BI es una completa y funcional solución que, además, está conectada a la nube.
Consejos de diseño
A la hora de diseñar un cuadro de mando, es recomendable seguir una serie de pautas que faciliten su entendimiento y utilización:
- Trata de mantenerlo siempre limpio y ordenando conservando solo la información que te sea más relevante.
- No tiene sentido sobrecargar el contenido. A veces, la simplificación es poder. Con Power BI puedes crear fichas generales y luego, si alguien está interesado en una en concreto, puede conocer más detalles entrando específicamente en ella.
- Tienes que tener en cuenta el tamaño de la pantalla de visualización para aprovechar al máximo los recursos. Si accedes desde un monitor grande, puedes agregar más contenido. Si va a utilizar mayoritariamente Smartphones o tablets, aprovecha mejor el espacio visual y hazlo más ligero.
- Resalta datos que sean importantes, como las ventas hasta la fecha o el nivel de satisfacción del cliente.
Crea tu propio cuadro de mando
La mejor manera de aprender a utilizar las herramientas de BI es crear por ti mismo un cuadro de mando. Con Power BI, puedes empezar de forma totalmente gratuita.
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